Amaranto

El amaranto es un superalimento con magníficas propiedades y beneficios para la salud, cuyo origen se remonta a las antiguas civilizaciones precolombinas azteca y maya.

Es por ello, que se le considera un símbolo cultural milenario por muchos pueblos americanos. Incluso, desde hace unos años, se le reconoció como Patrimonio Intangible de la Humanidad.

Se le conoce también con el nombre de alegría o coime, y en lengua náhuatl se le conocía como huautli.

El amaranto es considerado un pseudocereal, al igual que la quinoa, otro superalimento, debido a que posee características que lo asemejan con los cereales.

No obstante, existen otras características que lo separan de esta clasificación, como su aporte proteico, el cual excede al de los cereales, pareciéndose más a las legumbres.

Estas plantas herbáceas y sus diferentes especies están ampliamente distribuidas por todas las zonas de climas cálidos y templados.

Consta de unas pequeñas flores dentro de las cuales se encuentran las semillas o granos de amaranto.

Muchas especies de amaranto son cultivadas con fines ornamentales, mientras que en América Central y del Sur, son aprovechadas también sus semillas y hojas como alimento.

Propiedades del Amaranto

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Las propiedades medicinales del amaranto son múltiples, es fácil de digerir para el organismo y pesa poco, características suficientes para que la NASA lo haya escogido como alimento para astronautas.

Además, tuvo en cuenta otras características importantes, como que realiza una fotosíntesis muy eficiente produciendo gran cantidad de oxígeno sin necesidad de consumir demasiada agua.

Sin embargo, la NASA escogió a este superalimento para cultivar en sus viajes espaciales, sobre todo porque el amaranto posee un altísimo valor nutricional:

Posee un gran contenido de proteínas de alta calidad, entre el 13 y 18 por ciento, el cual supera a una gran parte de los cereales.

Además constituye una rica fuente de aminoácidos esenciales, es decir, compuestos que se necesitan incorporar mediante la dieta, pues el organismo no los produce.

Entre estos se encuentran la lisina, cuya proporción en otros alimentos es notablemente baja. Además de la valina, fenilalanina, isoleucina, treonina, metionina y triptófano.

Entre los minerales en su composición se incluyen el hierro, el calcio, potasio, zinc, magnesio, cobre y fósforo.

Contiene vitaminas A, del complejo B como la B1, B2, B3, B5 o ácido pantoténico, B6, ácido fólico o vitamina B9, además de ácido ascórbico o vitamina C, vitamina D, E y K.

Contiene carbohidratos y almidones aproximadamente entre un 50 y un 60 por ciento de su contenido.

Posee ácidos grasos esenciales: Contiene una cantidad de lípidos aproximada al 7 o 8 por ciento, siendo en su mayoría, ácidos grasos esenciales poliinsaturados como el Omega 3, el 6 y el 9.

Es rico en fibra alimentaria y contiene también abundantes antioxidantes

Los antiguos indígenas le atribuían a este superalimento propiedades afrodisiacas, vigorizantes y esotéricas, estas últimas explican su protagonismo en rituales religiosos.

También se le reconocen propiedades anticancerígenas, inmunológicas, detoxificantes, antiinflamatorias y antidepresivas

Beneficios del Amaranto

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Los beneficios del amaranto son aprovechados desde tiempos prehispánicos, siendo considerado, sobre todo en México, un alimento sagrado.

En primer lugar, ayuda a la salud del corazón y el sistema cardiovascular:

Es excelente para combatir y prevenir enfermedades como la hipertensión arterial, ya que se le considera un eficaz hipotensor.

Previene enfermedades como la aterosclerosis, puesto que reduce los valores de colesterol y triglicéridos en el organismo, debido a una coenzima presente en su composición.

Al ser un alimento rico en fitoesteroles y ácidos grasos esenciales, como el omega, impide que se absorba el colesterol, reduciendo de esta forma su concentración en la sangre.

Por otro lado, el consumo sistemático de amaranto puede aumentar los niveles de HDL, o colesterol bueno, lo que provoca la disminución del LDL o colesterol malo.

La fibra insoluble que contiene el amaranto, también disminuye la absorción del colesterol que se incorpora al organismo mediante la dieta, ya que favorece su eliminación a través de las heces.

Es también muy útil en la prevención y tratamiento de los trastornos digestivos:

Su alto contenido en fibra dietética, facilita el tránsito intestinal y mejora la digestión, por lo que es de gran eficacia para prevenir y tratar trastornos como el estreñimiento y la diverticulosis.

Además, debido a que es un alimento muy digestivo, se recomienda a personas que presenten dificultad para asimilar ciertos nutrientes.

Por otro lado, ofrece las condiciones adecuadas para el crecimiento de las bacterias que forman la flora intestinal normal, las cuales defienden contra microorganismos causantes de las diarreas.

Estas además, benefician en gran medida nuestra salud, mediando importantes funciones metabólicas, inmunológicas y fisiológicas.

Es recomendado en personas con enfermedad celíaca debido a que los granos de amaranto no contienen gluten, es un alimento que puede ser agregado con total seguridad a la dieta de las personas con intolerancia a este compuesto.

El amaranto también se usa para adelgazar. Este superalimento es ideal para perder peso de forma saludable. Además mejora el tránsito intestinal y aporta energía sin exceso de calorías.

Su alto contenido en fibra alimentaria produce sensación de saciedad, lo que ayuda a reducir la cantidad de alimento que ingerimos.

El amaranto resulta de gran utilidad para prevenir diferentes tipos de cáncer como el de colon, el cervicouterino, de mama, próstata y otros.

Debido a sus propiedades anticancerígenas, el amaranto tiene la capacidad de inhibir la proliferación de las células dañadas.

De esta forma, evita que la enfermedad se propague y destruya a otros tejidos y órganos sanos, proceso que se conoce como metástasis.

Su potente efecto anticancerígeno, se debe a uno de sus componentes llamado escualeno, el cual provoca importantes efectos antioxidantes a las células del organismo.  

Este alimento es importante para el cerebro, ya que los disímiles nutrientes que aporta al organismo, sobre todo minerales como el sodio, hierro, potasio, zinc, son de gran utilidad para nutrir y proteger el sistema nervioso central.

Es por ello que el consumo regular de amaranto puede prevenir enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer y la enfermedad de Parkinson.

¿Para qué más sirve el amaranto?

El amaranto también ofrece beneficios a la belleza, pues dota de suavidad y fortaleza al cabello, además de proteger la piel.

Además de aportar belleza en una piel sana, también es eficaz para combatir la inflamación en enfermedades como la psoriasis, eccemas, entre otras.

Debido a la presencia de un aminoácido esencial, en su composición, llamado lisina, el amaranto es capaz de proteger el cabello del daño, además de aportarle belleza.

Consumir regularmente amaranto, en cualquiera de sus formas de presentación, fortalece los folículos lo cual previene la caída excesiva del cabello y en el caso de los hombres la calvicie.

Además, esto ayuda a que el cabello adquiera mayor fuerza y resistencia a los factores externos que puedan dañarlo, como la incidencia de los rayos solares, el clima seco, entre otros.

Por otro lado su aceite, se utiliza en la elaboración de productos cosméticos, como son las cremas humectantes para la piel, agentes antioxidantes, y otros.

Su eficacia se debe a que mantiene la adecuada producción de queratina, que necesita el cabello para lucir radiante.

Además, debido a su contenido en ácidos grasos esenciales como el linoleico y el linolénico, así como en vitamina E, nutre tanto la piel como el cuero cabelludo.

Debido a que contiene gran cantidad de antioxidantes, es un alimento ideal para contrarrestar los efectos del envejecimiento.

Puede neutralizar los radicales libres y de esta forma, inhibir el proceso de oxidación de las células, que además de causar el envejecimiento, puede originar diferentes enfermedades mortales.

El amaranto es un gran aliado en estados depresivos o cuando simplemente estamos de mal humor.

Esto es debido al triptófano en su composición, un aminoácido fundamental en la formación de serotonina, un neurotransmisor que en estados depresivos disminuye.

También previene y alivia síntomas que por lo general acompañan los días de menstruación, como son el dolor mamario, la hinchazón, el bajo estado de ánimo, entre otros muy comunes.

El amaranto posee carbohidratos de bajo índice glucémico, o lo que es lo mismo, se absorben con menor rapidez, lo cual lo convierte en un alimento muy recomendado para diabéticos.

Por otra parte, este superalimento ayuda a regular los niveles de azúcar en el organismo, debido a su alto contenido en fibra alimentaria.

El amaranto posee cualidades diuréticas, debido a los minerales como el calcio y el potasio, otra buena razón para utilizarlo como antihipertensivo, pues reduce la retención de líquidos. 

Otras bondades del Amaranto para la salud

Es también muy útil en pacientes con insuficiencia renal crónica.

A pesar de que a los pacientes con enfermedad renal crónica se les recomienda dietas hipo proteicas, las proteínas del amaranto no resultan perjudiciales.

Estas proteínas se digieren fácilmente y la mayor parte de ellas son aprovechadas para la producción de otras proteínas importantes para el organismo,

De esta forma, los riñones no se esforzarían de más para metabolizarlas, pues los residuos a eliminar serían poco notables.

También es recomendado en pacientes con insuficiencia hepática, ya que es un efectivo depurador del hígado, debido a su contenido en fibra y otras importantes moléculas con efectos detoxificantes.

De este modo, el amaranto previene la aparición de complicaciones como la encefalopatía hepática.

Estas, se presentan con mucha frecuencia en pacientes que sufren de cirrosis o insuficiencia hepáticas.

Además, este superalimento disminuye el esfuerzo del hígado para llevar a cabo los procesos metabólicos, ya que la mayor parte de los nutrientes que este aporta son de fácil asimilación.

El amaranto es un alimento que, sin lugar a dudas, debe ser añadido a la dieta regular de los niños.

Es un excelente aliado para promover el adecuado desarrollo intelectual del niño, así como su correcto crecimiento, debido al altísimo valor nutricional que este posee.

Favorece además, funciones cerebrales de gran importancia en los infantes, en especial la capacidad de concentración, lo que se debe a su contenido en omega 3 y fósforo.

El aporte nutricional del amaranto, es tan elevado que puede ser comparado con el de la carne y otros productos de origen animal, de ahí su utilidad en las dietas de veganos y vegetarianos.

Por otro lado, se recomienda su consumo combinado con otros alimentos de gran potencial nutritivo, como legumbres y otros cereales, puesto que su aporte nutricional se duplica.

Este superalimento ofrece importantes beneficios tanto para la etapa del embarazo como para la lactancia, sirviendo de sólido sostén ya que previene trastornos comunes en estos periodos.

Es eficaz para prevenir y contrarrestar la anemia, que por lo general se produce debido al aumento de las necesidades, característico de este estado, por lo que el amaranto sería un útil suplemento.

Además evita la aparición de trastornos como la diabetes gestacional y la hipertensión arterial en el embarazo, que podría ocasionar graves consecuencias tanto para la madre como para el bebé.

Es especialmente útil para prevenir y combatir enfermedades óseas como es el caso de la osteoporosis, siendo eficaz también en el alivio de dolores y calambres musculares.

Como otros beneficios adicionales se asegura que el amaranto se recomienda en personas con elevadas necesidades energéticas, como es el caso de los deportistas.

Algunos expertos plantean, que podría ser útil en niños que padezcan autismo, así como eficaz para tratar alteraciones bucodentomaxilares.

Constituyen un aliado excelente para pacientes geriátricos, anémicos, desnutridos.

Regula y fortalece el sistema inmunológico, debido a su alto aporte de zinc, el cual es superior al de muchos otros alimentos.

Favorece la recuperación en el posoperatorio, y en lesiones frecuentes de los deportistas.

¿Cómo preparar amaranto?

como consumir el amaranto

El amaranto es cocinado por lo general, como cualquier cereal, primero se hierve y luego se agrega a ensaladas, guisos, en dependencia de la receta escogida, que puede ser fría o caliente.

Para elaborarlo es necesario, lavar primero los granos de amaranto. Y luego, se coloca en una olla una porción de los granos de amaranto en dos de agua con sal al gusto.

Por último, se deja hervir a fuego medio, por un intervalo de unos 7 a 10 minutos.

También podemos encontrar en el supermercado, copos o granos hinchados de amaranto. Estos pueden ser una excelente opción para consumir en el desayuno o las meriendas.

El amaranto hinchado se puede comer solo o agregar a la leche, el yogurt, incluso puede combinarse con otros cereales.

Si se desea, los copos pueden cocerse, teniendo en cuenta no exceder los 5 o 6 minutos de cocción.

¿Cómo se consume el amaranto?

Actualmente las semillas de amaranto, debido a su delicioso sabor, son utilizadas en la elaboración de dulces, panes, atole de amaranto, palanquetas, pepitorias, bombones y otras preparaciones muy diversas.

Las hojas, son consumidas frescas, por lo general en ensaladas u otro tipo de preparaciones, como si se fueran a preparar espinacas.

Las hojas además de comerse frescas, también pueden ser deshidratadas y molidas para elaborar polvo, y así conservar este alimento por más tiempo.

En el caso de los granos, se pueden añadir a sopas, potajes, arroces, guisos. También se puede elaborar harina y utilizar en panadería y repostería.

Esta harina elaborada a partir de los granos de amaranto, es muy valorada, ya que con ella se pueden preparar disímiles derivados de gran valor energético y nutricional.

Entre ellos, las harinas integrales, papillas para bebés, barras energéticas, concentrados proteicos, alimentos nutracéuticos especiales para personas que sufren de cáncer o diabetes, entre otros.

¿Has probado alguna vez palomitas de amaranto? Pues sí, es posible elaborar dicho platillo con este superalimento, y de hecho, es muy fácil.

Para su preparación primero debes colocar las semillas de amaranto en una sartén directo al fuego, después lo tapas, y en unos minutos tendrás un platillo delicioso y nutritivo.

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